La masacre de Chicago, ocurrida en mayo de 1886, es un acontecimiento que marco significativamente la histórica lucha de la clase obrera por su emancipación. Surgió de la lucha del proletariado de todo el mundo, por conquistar la reducción de la jornada de trabajo a 8 horas diarias. Ese 1ro de Mayo hace 124 años, más de 5 mil empresas se paralizaron en Estados Unidos y más de 340 mil obreros tomaron las calles en su justa lucha por la reducción de la jornada de trabajo. En chicago, la protesta rápidamente tomo un sesgo de violencia, que culminó el 4 de mayo con la masacre de la Plaza Haymarket, una ola brutal de allanamientos arbitrarios, detenciones y torturas contra el movimiento obrero y posteriormente un proceso judicial amañado contra los dirigentes de los trabajadores, cuatro de los cuales fueron condenados a muerte y ahorcados un año y medio después. Aún así, a finales de 1886 en EEUU, un total de 250mil trabajadores gozarían ya, de esta conquista histórica de la clase obrera.
A partir de este acontecimiento, el 1ro de mayo se constituyo en un día de lucha del proletariado mundial, a pesar de los intentos infructuosos de la burguesía internacional de borrarlo de la memoria del movimiento obrero, pretendiendo transformarlo en un día festivo de simple asueto. Hoy cuando se acentúa la crisis general del capitalismo, cobra vital importancia rememorar el 1ro de mayo como ejemplo de lucha y resistencia de la clase obrera, que no tiene otra alternativa, que cumplir su papel histórico de sepulturero del capitalismo, unida junto a sus aliados históricos, los campesinos, asumiendo el papel de vanguardia en el camino ineludible de la toma del poder y la liberación de toda la sociedad de la explotación capitalista, avanzando indeteniblemente por la senda de la construcción del socialismo.
Es totalmente contradictorio e inaceptable el hecho, de que en nuestro país, por un lado la clase obrera conquiste importantes derechos en materia de legislación laboral, en la Constitución Bolivariana, en algunos decretos como el del salario mínimo y el de inamovilidad, en leyes y reglamentos como la lopcymat, entre otros. Sin embargo, son violados de manera flagrante por funcionarios públicos corrompidos que están al servicio de patrones privados saboteadores, vinculados al golpismo y al imperialismo yanqui, en complicidad con jueces inmorales y corruptos, llegando al extremo de generalizarse en el país una política de judicialización de los conflictos laborales y la implementación del terrorismo sindical y el sicariato. Todo esto acontece, dentro del contexto de la crisis capitalista que se acentúa, y que le sirve de justificación a los patronos, dueños de los medios de producción, para descargar todo el peso de la crisis sobre los hombros de los trabajadores, despidiéndolos de manera arbitraria e impune, incumpliendo las ordenes de reenganche emanadas del ministerio del trabajo, violando flagrantemente la libertad sindical y los contratos colectivos, con la simple amenaza del cierre de las fabricas.
Ante este panorama, a la clase obrera en Venezuela y su movimiento sindical, se le plantean como tareas fundamentales, fortalecer la unidad del movimiento obrero para trascender el estrecho margen de la lucha reivindicativa, profundizar la lucha ideológica y política, que le permita actuar organizada y coordinadamente en todo el país, acompañando las gestiones legales, con acciones política contundente en la calle, asumiendo la dirección política por la profundización del proceso revolucionario, que la conduzca por la senda del Socialismo Científico.
¡POR UN AUMENTO DE SALARIO ESTE 1RO DE MAYO!
¡Por el Control Obrero en la Producción y la Distribución!
¡Por una Nueva L.O.T Proletaria!
¡Viva la Clase Obrera!
Federación Unión de Trabajadores al Socialismo (UTS-Lara)
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